(ZENIT Noticias / Washington, 10.12.2024).- Mientras la Corte Suprema de Estados Unidos delibera sobre US v. Skrmetti, un caso crucial que cuestiona la legalidad de las prohibiciones estatales a las intervenciones médicas transgénero para menores, la historia de una joven familia de Arizona ha agregado leña al fuego del debate nacional. El 4 de diciembre, los argumentos ante los jueces llevaron a manifestantes a Washington, D.C., entre ellos Michelle Callahan-DuMont y su hija de 10 años, que se identifica como transgénero y se hace llamar Violet. Violet dijo a sus padres que «era niña» cuando tenía 1 año y sus padres ¡le creyeron!

Una infancia marcada por la transición temprana

Callahan-DuMont afirma que su hija expresó una identidad transgénero desde la infancia. “Violet nos dijo quién era antes de que pudiera hablar completamente”, dijo, enfatizando su creencia de que la identidad de género de su hija era evidente a la edad de 18 meses.

La familia viajó a Washington para apoyar la manifestación “Libres de ser nosotros mismos” de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) que se llevó a cabo frente al tribunal. Violet, que ahora tiene 10 años, expresó sus inquietudes sobre la seguridad y la aceptación. «Tengo miedo de que me lastimen solo por ser quien soy», dijo Violet en una entrevista con CNN, destacando los desafíos que enfrentan los jóvenes transgénero en el clima polarizado de hoy.

After yesterday’s SCOTUS hearing determining if states can ban trans procedures for kids, interviewed a family who claimed their son knew he was a trans girl since BIRTH

Little did we know the family had already used their child for

— Elizabeth Troutman Mitchell (@TheElizMitchell)

Implicaciones legales y políticas

El fallo de la Corte Suprema, esperado en junio, determinará la constitucionalidad de la ley de Tennessee de 2022 que prohíbe los tratamientos médicos para personas transgénero menores de edad. La ley similar de Arizona, firmada por el exgobernador Doug Ducey, también podría enfrentar la revocación si la Corte anula el estatuto de Tennessee.

Los críticos de tales prohibiciones estatales argumentan que privan a las familias de autonomía y ponen en peligro a los jóvenes transgénero, mientras que los partidarios afirman que tales intervenciones son irreversibles y no deberían ser accesibles para los menores.

Defensa pública y personal

Callahan-DuMont se ha convertido en una defensora vocal de los derechos de las personas transgénero, administrando los perfiles públicos de las redes sociales de Violet para generar conciencia. Las publicaciones a menudo enfatizan la necesidad de protecciones legales y acceso a la atención médica para los jóvenes transgénero.

A raíz de la En las elecciones presidenciales de 2024, las preocupaciones de Violet sobre su futuro se convirtieron en un punto central de las discusiones familiares. “¿Tendremos que mudarnos? ¿Me llevarán? ¿Perderé mi medicación?”, según se informa, preguntó Violet después de que se anunciaran los resultados de las elecciones, lo que refleja los temores más amplios entre los defensores de los derechos LGBTQ+ sobre los cambios en el panorama político.

Conversación nacional divisiva

Este caso destaca la creciente tensión nacional en torno a los derechos de los menores transgénero y la autoridad parental. Si bien las familias como la de Violet abogan por la afirmación y el acceso a la atención médica, los oponentes plantean preocupaciones éticas sobre las transiciones tempranas y el potencial de daño.

La decisión de la Corte Suprema probablemente sentará un precedente sobre hasta dónde pueden llegar los estados en la regulación de decisiones médicas tan profundamente personales, lo que dará forma al panorama legal y cultural en los próximos años.

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