Desde junio de 2016 estaba al frente de este Ordinariato, el cardenal Carlos Osoro, en la actualidad arzobispo emérito de Madrid y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española por poco tiempo.

El Ordinariato se establece como una jurisdicción personal, dependiente de la Santa Sede. El cardenal José Cobo, además del gobierno pastoral de la diócesis de Madrid, asume con este nombramiento una misión pastoral que se extiende a todos los fieles de rito oriental que residen en España.

En este caso, el nombramiento se hace efectivo desde el momento de su comunicación y el cardenal Cobo ejerce ya como ordinario de los fieles católicos de rito oriental. El cardenal Osoro pasa a la condición de emérito. Hasta la creación de este Ordinariato, mediante el decreto Nobilis Hispaniae Natio, los católicos de rito oriental dependían de la Iglesia local del sitio en el que residían, confiados al obispo diocesano.

Desde que fuera nombrado el 12 de junio de 2023 arzobispo de Madrid, el cardenal Cobo sigue acaparando cargos. Poco después, el 30 de septiembre, fue creado cardenal en la Basílica de S. Pedro, con el título de Santa María de Montserrat de los Españoles. También fue nombrado durante el año pasado miembro del Dicasterio de los Obispos.

Cambios en la votación de la CEE

Tal y como c

Con este nombramiento sorpresa de Roma a tres días vista de que tenga lugar las votaciones para renovar los cargos en la Conferencia Episcopal, ya no serán 79 sino 78 los obispos que tendrán derecho a voto. Cobo ejerce ya como nuevo ordinario de los fieles de rito oriental que residen en España y Osoro ya es emérito desde esta mañana por lo que pierde su derecho a poder votar para elegir al próximo presidente de la CEE y al resto de cargos que se renuevan.

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