(ZENIT Noticias / Minsk, 23.01.2025).- El pasado 30 de diciembre fue condenado a 11 años de prisión en Bielorrusia el padre Henrykh Akalatovich. El párroco de la parroquia católica de Valozhyn es muestra de la persecución a los católicos en el país.

El sacerdote católico fue arrestado el 17 de noviembre de 2023 en la ciudad donde realiza su ministerio, a 43 millas de Minsk, la capital, y estuvo un año en el centro de detención. El 25 de noviembre de 2024 inició su juicio en sesión a puerta cerrada en el Tribunal Regional de Minsk. Se declaró inocente pero fue condenado por «traición contra el Estado», según Belsat, canal de noticias independiente que transmite desde Polonia. El secreto de la audiencia impide conocer los cargos contra el sacerdote.

El padre Henrykh estuvo recluido en el «peor de los centros de detención de Bielorrusia, comúnmente conocido como ‘Amerika’, nombre relacionado con los «espías estadounidenses». El periódico polaco Rzeczpospolita informó el 30 de noviembre que probablemente el padre Akalatovich cumpla su condena en la tristemente célebre colonia penal de Novopolotsk, donde cumple condena Andrzej Poczobut, activista de la minoría polaca en Bielorrusia detenido en 2021.

Según Belsat, el padre Akalatovich sufrió hace poco un ataque al corazón y cáncer, y fue sometido a una cirugía de estómago poco antes de la detención. No hay información sobre su salud desde el arresto.

El padre Akalatovich nació en la aldea de Novaya Mysha, región de Baranovichi. Inició su ministerio en 1984 tras graduarse del seminario de Riga. Fue elogiado por el régimen bielorruso ya que imparte sus homilías en idioma bielorruso. Su persecución inició después de las elecciones amañadas de 2020.

Otros casos conocidos de persecución a sacerdotes católicos fue la “noticia del arresto de dos de nuestros hermanos en Bielorrusia”, los sacerdotes Andrzej Yuchnevich y Pavel Lemekh, que realizan labor misionera en el santuario diocesano de Nuestra Señora de Fátima, en Sumilin, declaró el superior general de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada, padre Luis Ignacio Rois Alonso. Informó que la detención tuvo lugar el 8 de mayo de 2024, según el portal Katolik.life.

Otros 10 sacerdotes fueron arrestados en Bielorrusia durante 2023 y 3 de ellos todavía permanecen detenidos según informó la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada.

Los católicos en Bielorrusia son la décima parte de nueve millones y medio de habitantes. Hasta el 11 de noviembre de 2024, hay 1.287 presos políticos, entre ellos el fundador del grupo bielorruso de derechos humanos Viasna, Ales Bialiatski, Premio Nobel de la Paz en 2022.

La nueva ley sobre libertad de conciencia y organizaciones religiosas, firmada en diciembre de 2023 por el presidente Lukashenko, limita la educación y las actividades misioneras de las iglesias. Exigió, además, un nuevo registro a todas las parroquias con el riesgo de ser cerradas. El nuncio croata del Vaticano, arzobispo Ante Jozic, salió del país el 15 de septiembre pasado.

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